La nueva reina era muy bella, pero orgullosa y altanera, y no podía sufrir que nadie la aventajase en hermosura. Tenía un espejo prodigioso y cada vez que se miraba en él, le preguntaba: ‘Espejito en la pared, dime una cosa: ¿quién es de este país la más hermosa?’ Y el espejo le contestaba, invariablemente: […]