En la esquina noroeste de la Isla Sur de Nueva Zelanda, el Abel Tasman Coast Track (Ruta Costera de Abel Tasman) se despliega como un sendero de excepcional belleza. A lo largo de aproximadamente 60 kilómetros esta travesía costera atraviesa el Parque Nacional Abel Tasman, revelando playas doradas, aguas turquesas y una vegetación exuberante que conforman un paraíso para senderistas y amantes de la naturaleza.

El Abel Tasman Coast Track serpentea entre acantilados cubiertos de bosques nativos y bahías de arena fina que se alternan con formaciones rocosas esculpidas por el viento y el mar.

La topografía del recorrido varía entre suaves llanuras costeras y colinas ondulantes que ofrecen vistas panorámicas sobre el mar de Tasmania. La vegetación, dominada por helechos arbóreos, manukas y podocarpos, resguarda una biodiversidad única.

Abel Tasman Coast Track New Zealand
Apple Rock, uno de los lugares más característicos de la ruta. Crédito: RuslanKal / depositphotos.com

La costa, con sus caletas resguardadas y playas solitarias, se presta tanto para el descanso como para la exploración. En las aguas cristalinas, los visitantes pueden avistar focas en Tonga Island, mientras que los delfines y pingüinos azules a veces emergen en la distancia, añadiendo un elemento de sorpresa a la caminata.

La travesía completa del Abel Tasman Coast Track toma entre tres y cinco días, dependiendo del ritmo del senderista. Aunque es posible recorrerlo en ambas direcciones, la mayoría inicia en Marahau, en el extremo sur, y finaliza en Wainui, al norte.

Entre ambos puntos, se encuentran refugios y zonas de acampada estratégicamente distribuidos para garantizar una experiencia inmersiva en la naturaleza sin la necesidad de salir del parque.

Abel Tasman Coast Track New Zealand
Mapa del Abel Tasman Coast Track. Crédito: Gobierno de Nueva Zelanda

El primer tramo del recorrido, de Marahau a Anchorage es un sendero suave que introduce al caminante en el paisaje costero del parque, con vistas espectaculares a lo largo del camino.

Después llegan algunos de los tramos y elementos más característicos y pintorescos de la ruta, como el Torrent Bay Estuary (que se puede cruzar con la marea baja) y la Cleopatra’s Pool, una piscina natural de roca con un tobogán cubierto de musgo que invita a refrescarse.

Entre Bark Bay a Awaroa el camino es más desafiante, aunque recompensa con vistas inigualables y la posibilidad de cruzar la bahía de Awaroa en determinados horarios de marea.

Durante este trayecto, el sendero cruza el río Falls a través de un puente colgante de 47 metros de longitud, ofreciendo una vista impresionante de la ensenada.

Abel Tasman Coast Track New Zealand
El sendero atraviesa un puente colgante de 47 metros de longitud. Crédito: kyrien / depositphotos.com

La última sección desciende gradualmente hacia la bahía de Wainui, donde los excursionistas concluyen su travesía con una panorámica espectacular del parque.

El Abel Tasman Coast Track es uno de los senderos de la red Great Walks de Nueva Zelanda, lo que significa que cuenta con infraestructura bien mantenida, pero también con alta demanda en temporada alta. Es imprescindible reservar con antelación tanto los refugios como los campings.

A diferencia de otros senderos alpinos, este recorrido se encuentra a baja altitud y su clima es relativamente benigno. No obstante, la presencia de estuarios que solo pueden cruzarse en marea baja añade un factor de planificación clave. Además, el acceso a puntos intermedios puede realizarse mediante taxis acuáticos, lo que permite a algunos visitantes recorrer solo segmentos específicos sin necesidad de completar la caminata entera.

Abel Tasman Coast Track New Zealand
Algunas partes de la ruta solo se pueden atravesar con la marea baja. Crédito: daboost / depositphotos.com

El Parque Nacional Abel Tasman debe su nombre al explorador holandés Abel Janszoon Tasman, quien en 1642 se convirtió en el primer europeo en avistar Nueva Zelanda.

Sin embargo, mucho antes de la llegada de los europeos, esta región ya era hogar de comunidades maoríes que utilizaban la costa para la pesca y el comercio. Hoy en día, algunos vestigios de su presencia persisten en forma de (fortalezas) y otros sitios arqueológicos que añaden un trasfondo cultural al sendero.

Caminar el Abel Tasman Coast Track es mucho más que un ejercicio físico; es una inmersión en un paisaje primigenio donde la naturaleza dicta el ritmo del viaje. Ya sea explorando una playa solitaria, cruzando un estuario en marea baja o descansando bajo la sombra de un bosque costero, cada paso en este sendero revela una Nueva Zelanda distinta, una que deslumbra por su pureza y autenticidad.


FUENTES

Department of Conservation, New Zealand Government, Abel Tasman Coast Track

Abel Tasman, The Abel Tasman Track

100% Pure New Zealand, Abel Tasman Coast Track

Wikipedia, Abel Tasman Coast Track


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