Un equipo internacional de investigadores ha logrado fechar directamente los restos del llamado Niño de Lapedo, un esqueleto infantil hallado en 1998 en el abrigo rocoso de Lagar Velho, en la región de Leiria, Portugal, con características híbridas de neandertales y humanos modernos.

Gracias a la aplicación de la técnica de datación por radiocarbono en la hidroxyprolina del colágeno —un método altamente preciso y utilizado en restos de conservación deficiente—, los científicos han determinado que el individuo vivió entre 27.780 y 28.550 años antes del presente (cal BP). Estos resultados confirman la relevancia del hallazgo y ofrecen nuevos elementos de interpretación sobre el contexto del enterramiento y su significado cultural.

El Niño de Lapedo fue descubierto accidentalmente en 1998 cuando arqueólogos exploraban la zona tras el hallazgo de arte rupestre en la región. El esqueleto, de un niño de entre cuatro y cinco años de edad, fue encontrado en una fosa poco profunda, cubierto con ocre rojo y rodeado de restos de fauna. Su singular combinación de rasgos anatómicos de neandertal y Homo sapiens modernos lo convirtió en una pieza clave para entender la interacción entre ambas especies en la Europa del Paleolítico Superior.

niño neandertal humano portugal
El lugar del hallazgo en el Abrigo do Lagar Velho, Leiria, Portugal. Crédito: João Zilhão

Hasta la fecha, los intentos previos de datación directa del esqueleto habían fracasado debido a la degradación del colágeno y la contaminación por carbono moderno. No obstante, el equipo liderado por Bethan Linscott y sus colaboradores ha logrado obtener una fecha confiable gracias a la metodología de datación de hidroxyprolina, una técnica que aísla este aminoácido esencial del colágeno para eliminar contaminantes exógenos.

Uno de los aspectos más llamativos del hallazgo es la evidencia de un complejo ritual funerario. El cuerpo del niño fue colocado cuidadosamente en la tumba y cubierto con ocre rojo, una práctica extendida en el Paleolítico Superior y que ha sido interpretada como un acto simbólico relacionado con creencias espirituales. Además, huesos de ciervo rojo y una vértebra de conejo juvenil, hallados en contacto con el esqueleto, sugieren que estos restos pudieron haber sido depositados de forma intencional, quizá como ofrendas.

Sin embargo, el nuevo estudio ha puesto en duda algunas de las interpretaciones previas. Mientras que se creía que un fragmento de pelvis de ciervo había sido colocado como ofrenda, las nuevas dataciones indican que este hueso es ligeramente más antiguo que el niño, lo que sugiere que podría haber sido un elemento preexistente en el sedimento y no parte de un rito mortuorio deliberado.

niño neandertal humano portugal
Plano (A) y dibujo (B) del hallazgo. Se indica la posición de las muestras fechadas (los números de laboratorio en rojo corresponden a su redatación HYP). Crédito: João Zilhão / G. Casella

Los resultados también han permitido redefinir la cronología del sitio de Lagar Velho. El análisis de otros restos faunísticos y de carbón vegetal en el contexto del enterramiento ha mostrado que la acumulación de sedimentos en el abrigo rocoso ocurrió en varias fases, influenciadas por cambios climáticos y procesos geológicos. En particular, se identificó una actividad humana previa al enterramiento, caracterizada por la presencia de restos de animales y herramientas líticas en una zona contigua al sepulcro.

La datación de carbón asociado al contexto del niño indicó que éste es ligeramente más antiguo que el esqueleto, lo que lleva a los investigadores a descartar la hipótesis de que se tratara de una quema ritual realizada justo antes del entierro. En cambio, sugieren que este carbón proviene de un evento de ocupación humana previo.

En el momento de su descubrimiento, casi una década antes de que el ADN neandertal fuera secuenciado, apenas se conocía que nuestros antepasados se habían cruzado con los neandertales. Asombrosamente, el niño de Lapedo vivió en un tiempo cuando ya hacía decenas de miles de años que los neandertales se habían extinguido.

El uso de la datación por hidroxyprolina marca un hito en la investigación arqueológica, al demostrar su eficacia en la obtención de fechas precisas para restos que han sufrido una degradación significativa. Este método podría ser aplicado a otros yacimientos donde los intentos de datación directa han fracasado, permitiendo así una reevaluación de otros enterramientos paleolíticos de relevancia, como los de la cueva de Mladeč en la República Checa o el sitio de Abri Pataud en Francia.


FUENTES

Bethan Linscott et al., Direct hydroxyproline radiocarbon dating of the Lapedo child (Abrigo do Lagar Velho, Leiria, Portugal). Sci. Adv. 11, eadp5769(2025). DOI:10.1126/sciadv.adp5769


  • Compártelo en:

Descubre más desde La Brújula Verde

Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.

Something went wrong. Please refresh the page and/or try again.