Un hallazgo arqueológico en las cercanías de Jerusalén ha sacudido los cimientos del conocimiento histórico sobre el ascetismo en la época bizantina. Un equipo de científicos del Instituto Weizmann de Ciencia y la Autoridad de Antigüedades de Israel ha identificado los restos de una mujer en un entierro ascético tradicionalmente asociado con hombres, un descubrimiento que plantea nuevas preguntas sobre el papel de las mujeres en las prácticas religiosas extremas del siglo V d.C.

Durante excavaciones en el sitio de Khirbat el-Masani, un monasterio bizantino datado entre los siglos IV y VII, se hallaron varias tumbas. Entre ellas, destacó una en particular: un entierro donde el individuo había sido envuelto en cadenas, una práctica ascética que simbolizaba el sacrificio del cuerpo y el desapego del mundo material. Tradicionalmente, este tipo de penitencia se ha asociado con los anacoretas masculinos, por lo que los arqueólogos asumieron que los restos pertenecían a un hombre. Sin embargo, la pobre conservación de los huesos impidió una determinación ósea concluyente del sexo del individuo.

Ante la imposibilidad de recurrir a métodos osteológicos tradicionales, los investigadores recurrieron a la proteómica del esmalte dental, una técnica innovadora que permite determinar el sexo biológico a través del análisis de proteínas en el esmalte dental. En este caso, los científicos analizaron la presencia de la proteína amelogenina, que posee variantes específicas en los cromosomas X e Y. La ausencia de la variante masculina (AmelY) en la muestra indicó de manera concluyente que el individuo era una mujer.

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Mapa del yacimiento arqueológico de Khirbat el-Masani’, cerca de Ramat Shlomo, Jerusalén, y de la iglesia de El-Masani con la tumba del hallazgo (T3) indicada con una flecha. Crédito: Matan Chocron / Autoridad de Antigüedades de Israel

El hallazgo desafía la creencia establecida de que el ascetismo extremo, como el uso de cadenas para limitar la movilidad, era una práctica exclusivamente masculina. Si bien se conocen casos de mujeres nobles que fundaron monasterios y participaron en la vida religiosa, la identificación de una mujer que llevó su devoción hasta el extremo de la automortificación es inédita en el registro arqueológico.

Los historiadores han documentado figuras femeninas en el cristianismo primitivo que adoptaron estilos de vida ascéticos, como Melania la Joven, quien se retiró a una celda minúscula para orar y ayunar. Sin embargo, no se había encontrado evidencia material que confirmara que algunas mujeres también adoptaron las formas más extremas de penitencia.

El monasterio donde se halló la tumba se encontraba en un punto estratégico para la peregrinación cristiana hacia Jerusalén. Durante el periodo bizantino, la ciudad se convirtió en un centro religioso de gran importancia, atrayendo a fieles de todo el Imperio Romano.

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Los restos del «monje» en el momento del hallazgo. Crédito: Autoridad de Antigüedades de Israel

Los monasterios servían no solo como centros espirituales, sino también como refugios para los peregrinos. En este contexto, la presencia de una mujer ascética sugiere que la participación femenina en estas comunidades pudo haber sido más activa y rigurosa de lo que se pensaba.

El descubrimiento subraya la importancia de las mujeres en el movimiento monástico y desafía las narrativas convencionales sobre la participación femenina en la religión y la espiritualidad. Además, destaca cómo el avance de la ciencia, en este caso la proteómica del esmalte dental, está revolucionando la forma en que los arqueólogos y antropólogos reconstruyen el pasado.

Los investigadores han enfatizado la necesidad de continuar explorando otros contextos arqueológicos con esta metodología para detectar posibles casos similares. Este es solo el comienzo de una reevaluación de cómo entendemos el ascetismo femenino en el mundo bizantino, afirman los investigadores.


FUENTES

Paula Kotli, David Mongenstern, et al., Sexing remains of a Byzantine ascetic burial using enamel proteomics. Journal of Archaeological Science: Reports, Volume 62, April 2025, 104972. doi.org/10.1016/j.jasrep.2025.104972


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