Un nuevo estudio de investigación internacional, liderado por Henrik Drake, Profesor Asociado de Ciencias Ambientales en la Universidad Linneo, muestra que microorganismos vivieron en las profundidades del lecho rocoso de Groenlandia hace 75 millones de años.
Bajo nuestros pies se encuentra un hábitat llamado biosfera profunda. En este entorno hostil, sin luz solar y sin oxígeno disuelto, los microorganismos han vivido durante millones de años. Sin embargo, se sabe menos sobre cuánto tiempo ha existido la vida en el lecho rocoso y cuán extendida está. Esto se debe a que solo hemos hecho pinchazos en este entorno inexplorado. Pero cada vez se encuentran más piezas del rompecabezas.
En relación con investigaciones en el oeste de Groenlandia, los investigadores han perforado profundamente en el lecho rocoso cerca de la capa de hielo. A varios cientos de metros de profundidad, encontraron minerales que recubrían fracturas en el lecho rocoso, los cuales sirven como importantes archivos geoquímicos de vida antigua.
Utilizamos geocronología de alta resolución del carbonato de calcio, un método en el que se examina cuánto uranio se ha desintegrado en plomo. Las dataciones dieron edades de 64-75 millones de años, dice Henrik Drake.
Estas edades coinciden con eventos tectónicos relacionados con las primeras etapas, o precursores, de la apertura del Atlántico y del Mar de Labrador. Esto sugiere que las redes de fracturas profundas en el oeste de Groenlandia se abrieron y fueron colonizadas por microorganismos arrastrados por el agua, como los reductores de sulfato, durante estos eventos. Los movimientos de los continentes han influido, por lo tanto, en cómo la biosfera profunda ha sido colonizada.
Henrik Drake explica los hallazgos del núcleo de perforación de los investigadores como huellas químicas, que indican que la vida existía en este entorno hostil. Además, se descubrieron rastros biológicos en forma de ácidos grasos bacterianos, que se conservaron dentro de cristales de carbonato de calcio.
Cuando recuperamos los núcleos de perforación, realizamos análisis exhaustivos de diferentes isótopos de azufre en minerales formados en las fracturas del lecho rocoso. Los resultados muestran claramente que los minerales fueron formados por bacterias (reducción microbiana del sulfato).
FUENTES
Drake, H., Makahnouk, W. R. M., Roberts, N. M. W., Reinhardt, M., Henkemans, E., Frape, S. K., et al. (2024). Late Cretaceous and Early Paleogene fluid circulation and microbial activity in deep fracture networks of the Precambrian basement of Western Greenland. Geochemistry, Geophysics, Geosystems, 25, e2024GC011646. doi.org/10.1029/2024GC011646
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