Un equipo internacional de investigadores ha realizado un estudio exhaustivo de los restos cremados de infantes y niños encontrados en el tofet de Zita, Túnez, revelando una compleja historia de salud precaria y rituales mortuorios cuidadosos que desafía las interpretaciones previas sobre estos controvertidos sitios sagrados.
El estudio, publicado recientemente en la revista Antiquity, se centra en el análisis osteológico de 12 individuos, entre infantes y niños, cuyos restos fueron descubiertos en urnas y fosas dentro del tofet de Zita, un yacimiento arqueológico que estuvo habitado desde el siglo V a.C. hasta el 450 d.C.
Los tofets, santuarios fenicios y púnicos donde se enterraban infantes y niños cremados, han sido objeto de intenso debate académico durante décadas, con interpretaciones que van desde la práctica de sacrificios infantiles hasta cementerios especializados para niños fallecidos por causas naturales.
El equipo de investigación, liderado por Jessica I. Cerezo-Román de la Universidad de Oklahoma y Brett Kaufman de la Universidad de Illinois Urbana-Champaign, adoptó un enfoque innovador al examinar estos restos, inspirándose en la perspectiva del curso de vida para explorar no solo las circunstancias de la muerte de estos individuos, sino también aspectos de su corta existencia y el contexto socioeconómico en el que vivieron.
Los hallazgos del estudio son sorprendentes y revelan una imagen compleja de la vida en Zita durante el período neo-púnico. Los investigadores encontraron evidencia generalizada de problemas de salud crónicos entre los infantes y niños examinados, incluyendo signos de escorbuto, anemia y estrés fisiológico o infección. De los 12 individuos analizados, nueve presentaron evidencia sugestiva de escorbuto, una condición causada por la deficiencia de vitamina C que podría reflejar carencias nutricionales tanto en los niños como en sus madres lactantes.
Además, seis individuos mostraron signos de cribra orbitalia, una condición asociada con la anemia, y dos presentaron lesiones en los huesos del cráneo típicas de la anemia severa. Estos hallazgos sugieren que la vida en Zita era difícil, con una población infantil que enfrentaba múltiples desafíos de salud que probablemente contribuyeron a su temprana mortalidad.
Lo que hace particularmente intrigante este estudio es la ausencia de evidencia directa de trauma perimortem o violencia en los restos examinados, lo cual pone en tela de juicio las interpretaciones previas que asociaban automáticamente los tofets con prácticas de sacrificio infantil. En cambio, los investigadores encontraron indicios de un tratamiento funerario cuidadoso y respetuoso, con evidencia de que los huesos cremados fueron recolectados meticulosamente de las piras funerarias y colocados en urnas o fosas con gran atención al detalle.
El estudio también arroja luz sobre las condiciones de vida en Zita durante este período, sugiriendo que la transición de una economía rural púnica a una economía romana industrializada de excedentes, que comenzó en el siglo I d.C., pudo haber tenido un impacto sustancial en la población. La presencia de escorbuto entre los infantes y niños podría indicar que algunos sectores de la población no tenían acceso a productos agrícolas ricos en vitamina C, como uvas y aceitunas, que se cultivaban en las cercanías pero posiblemente se destinaban principalmente a la exportación como vino y aceite.
Además, el aumento de las actividades industriales en Zita, evidenciado por la producción extensiva de metales, cerámica y carbón, probablemente contribuyó a la contaminación ambiental y al deterioro de la calidad del aire, factores que podrían haber exacerbado los problemas de salud observados en los restos infantiles, particularmente las infecciones del tracto respiratorio.
Los investigadores subrayan que, si bien no pueden determinar con certeza la causa exacta de la muerte de estos infantes y niños, es evidente que muchos de ellos sufrían de mala nutrición y problemas de salud al momento de su fallecimiento. Este hallazgo ofrece una nueva perspectiva sobre la función de los tofets en la sociedad púnica y neo-púnica, sugiriendo que estos sitios podrían haber servido como espacios sagrados para el entierro de niños que fallecieron por causas naturales, pero cuyas muertes estaban intrínsecamente ligadas a las duras condiciones de vida y los desafíos de salud prevalentes en la comunidad.
FUENTES
Cerezo-Román J.I, Kaufman B, McGowan G, et al., The life and death of cremated infants and children from the Neo-Punic tophet at Zita, Tunisia. Antiquity. 2024;98(400):936-953. doi:10.15184/aqy.2024.85
Descubre más desde La Brújula Verde
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.