Un descubrimiento arqueológico en Oxfordshire (Inglaterra) ha sacado a la luz pruebas de asentamientos humanos que abarcan desde la Edad de Bronce hasta la Edad de Hierro Media. Las excavaciones realizadas en el lugar donde se proyecta construir un aparcamiento disuasorio cerca de la localidad de Eynsham revelaron vestigios de una antigua granja, incluidos restos estructurales de casas redondas, recintos y otros edificios datados en la Edad de Hierro Media.
Entre los hallazgos también se encontró un raro enterramiento de cremación de un niño de la Edad de Bronce Temprana que incluía un alfiler de hueso de águila, lo que sugiere un significado simbólico o ritual.
El enterramiento crematorio estaba colocado en una fosa poco profunda, mezclado con restos de carbón de la pira utilizada para incinerar el cuerpo. El análisis de los restos realizado por osteólogos y zooarqueólogos permitió identificar fragmentos de un alfiler moldeado a partir de la falange (hueso de una pata) de águila dentro del enterramiento.
Se trataba del único ejemplo conocido de esta especie en un contexto funerario en Inglaterra. Una perforación en un extremo del alfiler indica que pudo estar suspendido, posiblemente por una cuerda hecha de fibras vegetales o tendones animales.
La inclusión de un objeto tan simbólico en el enterramiento de un niño sugiere que la iconografía o mitología del águila pudo tener un significado especial en los sistemas de creencias locales de la Gran Bretaña de la Edad de Bronce temprana.
Los restos de asentamientos posteriores datan de la Edad del Hierro Media, entre 400 a.C. y 100 d.C. aproximadamente. En una amplia zona del yacimiento se descubrieron evidencias de construcciones con postes de madera, recintos y sistemas de drenaje asociados a casas redondas. Las casas redondas estaban delimitadas por zanjas circulares poco profundas que habrían dirigido el agua lejos de la estructura.
Los agujeros para postes y los pozos de dos casas redondas probablemente servían de anclaje a elementos internos como los soportes del tejado. También se recuperaron artefactos domésticos como cerámica y pesas de telar de arcilla (para uso en un telar de pesas verticales), lo que indica que la producción textil pudo ser una actividad importante en el asentamiento.
Las pruebas arqueológicas aportan información sobre la distribución y la vida cotidiana de esta pequeña granja de la Edad del Hierro en esta región de Gran Bretaña. La mayor parte de la actividad del asentamiento parece haberse centrado en el pastoreo, el cultivo y la fabricación textil.
El enterramiento más antiguo, sin embargo, permite vislumbrar el mundo simbólico de la población local de la Edad del Bronce temprana. La inclusión del alfiler de águila real, un objeto raro y visualmente llamativo, probablemente un talismán, sugiere que estas aves pudieron tener un significado religioso o mitológico especial, aunque los detalles concretos siguen siendo inciertos sin más pruebas.
La investigación y el análisis en curso pueden revelar detalles adicionales sobre las prácticas y creencias espirituales de estos antiguos británicos.
Fuentes
Descubre más desde La Brújula Verde
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.