En una excavación en el norte de México, los estudiantes y profesores de arqueología de la Universidad Brigham Young (BYU) descubrieron recientemente artefactos que han estado enterrados durante 1.000 años, incluyendo fragmentos de cerámica, piedras de martillo, granos de maíz y – intrigante en un lugar a 400 kilómetros tierra adentro – una cuenta de concha del Océano Pacífico.
El yacimiento conocido como Casas Grandes, también llamado Paquimé, fue una gran ciudad antigua que alcanzó su apogeo entre los años 1200 y 1400 d.C. El yacimiento atrae a arqueólogos de todo el mundo para analizar su singular mezcla de influencias culturales, con pruebas (como la concha marina) que sugieren interacciones entre los Paquimé y pueblos lejanos. Durante los últimos 10 años, un equipo de la BYU ha estudiado una época menos conocida, el periodo viejo, anterior a la era principal de Casas Grandes.
Realmente estamos tratando de llegar a lo que llamamos las raíces de Casas Grandes, dijo el profesor de arqueología de BYU Mike Searcy. Hay una conexión entre la gran ciudad de Paquimé y el sitio que estamos excavando. Por alguna razón la gente regresó para construir una ciudad aún más grande. ¿Qué provocó este surgimiento no sólo de una población mayor, sino del mayor centro urbano de los desiertos del noroeste de México?.
En el pequeño caserío agrícola justo al sur de Paquimé que el equipo excavó, un sitio al que llamaron “San Diego”, el grupo utiliza picos y palas para cavar largas zanjas, buscando rastros de estructuras antiguas o pozos de basura como pistas para saber dónde cavar más ancho y más profundo. En 2019 descubrieron el suelo de la mayor estructura comunal conocida del periodo viejo, un edificio de 9 metros de diámetro lo suficientemente grande como para albergar entre 30 y 40 personas.
Cada palada llena de tierra que sacamos está proporcionando nuevos datos sobre los antiguos pueblos que prosperaron en el desierto, dijo Searcy. El grupo ha aprendido mucho sobre la resistencia y el ingenio de los habitantes del yacimiento de San Diego, incluidos los esfuerzos organizados del asentamiento para construir la estructura comunal.
La estructura comunal que excavamos hace varios años contenía enormes postes de medio metro de diámetro, dijo Scott Ure, profesor de la BYU. Eran troncos de pino. Creemos que probablemente procedían de las montañas cercanas. ¿Se imaginan cortar uno de esos troncos y traerlo hasta aquí? Eso requirió algún acuerdo en la comunidad para trabajar juntos.
Estos detalles pueden servir de lección a quienes hoy intentan prosperar en climas difíciles. Te das cuenta de lo inteligente e increíble que era la gente para sobrevivir en este entorno, dijo la estudiante de arqueología Emily Brown. El objetivo de la arqueología es tomar algo misterioso y desconocido y hacerlo familiar. Realmente sientes mucho respeto por la gente cuando ves muy de cerca lo que hacían.
El equipo ha empleado algunas tecnologías avanzadas para documentar sus descubrimientos, como instrumentos topográficos robóticos que cartografían los artefactos con una precisión milimétrica, GPS de calidad topográfica y sistemas aéreos no tripulados que toman imágenes del yacimiento desde el cielo. El manejo de esta tecnología es una parte importante de la formación arqueológica de los estudiantes.
La inmersión en la cultura -desde la colaboración en la excavación con compañeros estudiantes de arqueología de la Escuela Nacional de Antropología e Historia, en el norte de México, hasta la experiencia con la comida y la lengua de la zona- también añade una profundidad a la formación de los estudiantes que no es posible alcanzar en el campus.
Puedo sentarme en un aula y hablar de lo que supone mover tierra, pero no hay nada mejor para un estudiante que encontrar su primera punta de flecha o sacar una pieza de cerámica con diseños que nunca antes habíamos visto, afirma Searcy. Es uno de los pináculos del aprendizaje experimental estar en el campo con los estudiantes y verles hacer descubrimientos.
Fuentes
Descubre más desde La Brújula Verde
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.