La oferta para pernoctar durante unas vacaciones es amplia y variada, existen un buen número de opciones de alquiler que dicen mucho de la clase de turista que eres y de cómo te gusta pasar las vacaciones. Y es que no es lo mismo alquilar una villa en Calpe que una habitación de motel en el centro de Madrid, como no es lo mismo descansar junto al mar que dedicarte a conocer una capital europea.
En cualquier caso, hay que saber qué tipos de alojamientos vacacionales existen para saber con qué tipo de vacaciones te sientes más identificado. Estas son las distintas fórmulas para descansar cuando se está de viaje en época de descanso.
Motel, hotel, hostal
Aunque de similares características, existen diferencias básicas entre estos tres modelos de hospedaje que son, en líneas generales, los más demandados a la hora de salir de escapada de fin de semana o para vacacionar por periodos cortos de tiempo.
Los hoteles son los más habituales, se trata de establecimientos turísticos que ofrecen el más amplio abanico de servicios a sus clientes, desde restauración a limpieza de habitaciones diarias, piscina, televisión privada, minibar… tienen una clasificación en cuanto a calidad que puede variar desde 1 estrella, los más simples, hasta los de 7 estrellas, considerados de lujo.
Los hostales y los moteles son muy parecidos entre sí. Presentan precios mucho más económicos, pero prescinden de la mayoría de los servicios. Las habitaciones son, por regla general, individuales o compartidas de dos camas. Los hostales pueden llegar a lucir hasta 3 estrellas, los moteles, sin embargo, son espacios para estadías mucho más cortas de tiempo, de 1 día de media. Son elegidos por los viajeros en tránsito para descansar y aguantar futuras jornadas de carretera hasta llegar al destino. Estos dos no están considerados como alojamientos turísticos de pleno derecho, aunque nada impide que se usen con estos efectos.
La pensión
Estas variantes de los hoteles son menos sofisticadas, aunque pueden llegar a ser muy confortables y familiares. Es una estupenda opción para aquellos que pasan largas temporadas para conocer un lugar, pensando que van a pasar prácticamente todo el día de turismo por las inmediaciones, es decir, sin parar en la pensión más que para dormir. Esto implica que se va a pagar mucho menos que en un hotel. Opcionalmente se pueden recibir tres comidas diarias.
Las villas y casas privadas
Son viviendas en las que el turista podrá elegir si hacer un alquiler íntegro de la vivienda o compartir espacio con otros turistas. Esta opción es muy habitual en vacaciones en grupo, ya sean familiares o con amigos, ya que permite disfrutar de todo el tiempo juntos en una misma estancia. Además, dependiendo de las prestaciones de la vivienda será posible realizar actividades juntos sin salir de la propiedad. Por otro lado, es posible alquilar partes de una casa de vacaciones, pero en ocasiones será necesario compartir ciertas zonas con otros grupos de personas. Pero esta modalidad ofrece también ventajas (conocer la idiosincrasia y cultura de las gentes, ser más barato,),
Los resorts
Posiblemente, el sueño turístico de la mayoría de las personas que lo quieren todo. Se trata de complejos más o menos de gran tamaño destinados al alquiler vacacional. Estos lugares incluyen la mayoría de los servicios turísticos, como son spas, piscinas, gimnasios, bares, clubes, restaurantes… y puede elegirse entre casa, chalets y apartamentos.
Las Guest House’s
Las casas de huéspedes son una fórmula muy interesante para familias. Son viviendas turísticas que pueden o no compartirse con otros turistas. Todo lo que hay en ella es para uso y disfrute del que la alquila.
El Hotel – apartamento
Parecido a una casa de huéspedes y a un hotel, solo que sin compartir y sin servicios personales. En este tipo de inmuebles también se pone a disposición todo el equipamiento, habrá cocina, lavaderos, duchas, espacios de recreo… Ofrece un alto grado de independencia.
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