En el yacimiento de Lány-Břeclav, en la República Checa, encontraron una costilla de animal inscrita junto a cerámica del tipo Praga, asociada a los primeros eslavos. Este hallazgo único proporciona las primeras pruebas del uso de un sistema de escritura entre los eslavos. El hueso, sin embargo, está inscrito con runas germánicas y, por tanto, no está escrito en escritura glagolítica, que hasta ahora se consideraba el primer sistema de escritura utilizado entre los eslavos.

El hueso inscrito que excavamos en 2017 fue estudiado por un equipo internacional de investigadores de la República Checa, Austria, Suiza y Australia que descubrió que es la inscripción más antigua jamás descubierta entre los eslavos. Se trata de un gran descubrimiento de importancia no solo nacional, sino también europea, dijo Jiří Macháček, jefe del Departamento de Arqueología y Museología de la Facultad de Artes de la Universidad Masaryk y líder del equipo internacional.

Para analizar el hueso se utilizaron los últimos métodos de datación genética y por radiocarbono. La edad de la inscripción se confirmó mediante el análisis del desgaste por el uso combinado con la microscopía SEM. Estos delicados análisis revelaron que el hueso era de un ganado que vivió aproximadamente en el año 600 de nuestra era, dijo Zuzana Hofmanová, miembro del equipo de la Universidad de Friburgo, especializada en el análisis del ADN antiguo.

Las runas en el hueso / foto Universidad de Masaryk

Robert Nedoma, experto en lenguas germánicas de la Universidad de Viena, identificó que la inscripción estaba escrita en Futhark antiguo. Esta escritura fue utilizada por los habitantes de habla germánica de Europa Central entre los siglos II y VII de nuestra era. El alfabeto Futhark antiguo consta de 24 runas, las siete últimas de las cuales estaban inscritas en el fragmento de costilla recientemente descubierto. Es probable que todo el alfabeto estuviera inscrito originalmente en el hueso. El hueso no llevaba inscrito un mensaje específico. Más bien parece ser una ayuda para el aprendizaje, una idea a la que dan peso los diversos errores de la inscripción. En la actualidad, los investigadores europeos sólo conocen 17 inscripciones que contienen líneas completas o parciales de Futhark antiguo.

Hasta este descubrimiento, se consideraba que el sistema de escritura más antiguo entre los eslavos era la escritura glagolítica, que fue llevada a Moravia desde el Imperio Bizantino en el siglo IX de nuestra era por los santos Constatino, Cirilo y Metodio. Este descubrimiento pionero, realizado por arqueólogos de la Universidad de Masaryk, demuestra que, antes de la introducción de la escritura glagolítica, los eslavos habían entrado en contacto con las runas, que podrían haber utilizado para contar o adivinar, por ejemplo. Este hallazgo también pone en duda que las diferencias culturales entre la Europa germánica y la eslava fueran tan claras. El hecho de que sea la evidencia más temprana de escritura entre los eslavos es ciertamente interesante para los casi 300 millones de personas que hablan lenguas eslavas, añadió Macháček.

Los arqueólogos de MU publicaron sus hallazgos en Journal of Archaeological, una de las revistas internacionales más destacadas en este campo. Una vez que los investigadores completen su estudio del yacimiento, que aún está en curso y forma parte del proyecto EXPRO, apoyado por la Fundación Científica Checa, las runas de Lány se expondrán al público en la Universidad de Masaryk.


Fuentes

Masaryk University / Jiří Macháček, Robert Nedoma, Petr Dresler, Ilektra Schulz, Elias Lagonik, Stephen M. Johnson, Ludmila Kaňáková, Alena Slámová, Bastien Llamas, Daniel Wegmann, Zuzana Hofmanová, Runes from Lány (Czech Republic) – The oldest inscription among Slavs. A new standard for multidisciplinary analysis of runic bones, Journal of Archaeological Science, Volume 127, 2021, 105333, ISSN 0305–4403, doi.org/10.1016/j.jas.2021.105333.


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