Cualquiera al que le guste la diversión habrá soñado con conocer alguna vez la ciudad norteamericana de Las Vegas. Ese rincón del mundo que parece no descansar nunca y donde la oferta de entretenimiento es increíblemente amplia es el deseo de muchos viajeros.
Las Vegas está dividida principalmente en dos zonas especialmente interesantes. Por un lado, el Strip y, por el otro, la calle Fremont. Pero, ¿qué diferencia a cada una? Empecemos por partes.
Cuando hablamos del Strip, estamos haciendo referencia a la calle más conocida de la ciudad. Es aquí donde podemos encontrar los casinos y hoteles más famosos por lo que se ha convertido en una de las avenidas más visitadas (y también fotografiadas) de todo el mundo.
Con 5 kilómetros de longitud, no sólo es posible admirar los edificios más lujosos, sino que además se pueden disfrutar diferentes espectáculos ofrecidos por los hoteles. Además, en el Strip se encuentra el centro comercial más visitado de Las Vegas, el Fashion Show Mall en el que se pueden encontrar las mejores tiendas de ropa, así como también restaurantes y locales de comida rápida.
Sin lugar a dudas, la mejor hora para recorrer el Strip es cuando la noche comienza a caer y el ambiente se viste de fiesta. Nada mejor que aprovechar este momento para descubrir cada rincón de la ciudad y observar el comportamiento de la gente.
La calle Fremont, por su parte, viene a representar la parte antigua de la urbe, por lo que se ha convertido en la segunda calle más importante de la ciudad. Aquí es posible disfrutar del famoso espectáculo Fremont Street Experience.
Esta calle representa un papel importante en la vida de Las Vegas aunque es cierto que muchos viajeros con el tiempo justo deciden dejarla de lado y sólo visitar el Strip. Sin embargo, quien tenga el tiempo suficiente no debería perderse la oportunidad de recorrerla.
Escenario de varias películas, la calle Fremont solía ser la más reconocida de Las Vegas hasta que a finales del siglo XX el Strip ganó la batalla por convertirse en el sitio más emblemático de la ciudad, logrando que los grandes casinos y hoteles se mudaran hacia este otro punto de la ciudad.
Nadie que haya pisado esta ciudad se arrepentirá de haber vivido la experiencia en las dos calles más importantes del lugar.
Pero ¿qué cosas se pueden hacer en Las Vegas? Aparte de acudir a los numerosos casinos, que siguen funcionando a pesar de que la tecnología ya nos permite jugar a las tragaperras online con dinero real, y que hemos visto en numerosas películas como la saga de Ocean’s Eleven.
Pues, por ejemplo, se puede dar un paseo en góndola. En el Venetian disponen de una serie de canales que recorren el interior y el exterior del hotel, con todo el atrezzo necesario para hacerte pensar que estás en la mismísima Venecia.
Otra cosa que no debes dejar de hacer es contemplar la magia De la Fuente del Bellagio, un espectáculo de luz y sonido sin igual y que, además, es gratis.
Y si quieres ver la ciudad de una manera diferente, no dejes de subir al High Roller, la noria más alta del mundo, o a la cima De la Torre Eiffel en el casino Paris.
Pronto los casinos volverán a abrir y la ciudad de Las Vegas recuperará su vitalidad, su esplendor y sus espectaculares noches de diversión.
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