Observando una imágen de satélite de una zona del estado indio de Andhra Pradesh, al este de la reserva forestal de Kadiri, veremos algo que parece un gran bosque. Ciertamente su tamaño, comparado con el de las casas cercanas, es considerable, pero en realidad tal masa boscosa está formada por un solo y único árbol.
Se trata del conocido como Thimmamma Marrimanu, toda una celebridad en la India, donde este tipo de árboles llamados banianos o higueras de Bengala (ficus benghalensis) son muy importantes en el aspecto religioso.
Tanto que se le considera el árbol nacional del país. Las raíces se asocian con Brahma, el tronco con Visnú y las hojas con Siva. Las gentes atan lazos en sus ramas y colocan figuritas votivas en los huecos de sus raíces.
Los banianos, que incluyen además otras especies, son árboles que se desarrollan de una manera poco convencional, desde arriba hacia abajo. Inicialmente las semillas germinan en las grietas de la corteza de otro árbol, pero también en muros o paredes de edificios, y van creciendo hasta que las raíces aéreas forman un pseudotronco que termina por engullir al árbol huesped o destruir el muro.
Sus ramas se van extendiendo de manera horizontal y creando nuevas raíces aéreas, las cuales por efecto del peso acaban tocando tierra y formando troncos suplementarios. Existen muchos banianos en el subcontinente indio que alcanzan dimensiones considerables, como el Thimmamma Marrimanu o el Gran Baniano del Jardín Botánico de Calcuta (hoy oficialmente Kolkata), cuya copa tiene una circunferencia de 330 metros.
La extensión de la copa o dosel arbóreo del Thimmamma Marrimanu cubre la increíble superficie de 19.107 metros cuadrados (0,019 kilómetros cuadrados), razón por la cual parece constituir un auténtico bosque y figura en el libro Guinness de los Records como el especimen arbóreo más grande del mundo.
Bajo las ramas del árbol hay un templo dedicado a Thimmamma, quien según la leyenda se habría inmolado en el lugar al morir su esposo en 1434. Se cree que el árbol creció justo en el lugar donde se levantó la pira funeraria, de uno de sus troncos. En tal caso su edad rondaría los 550 años.
La tradición local afirma que las parejas sin hijos que acudan al templo concebirán al cabo del año, por lo que es un lugar especialmente concurrido, pero también que una maldición caerá sobre aquellos que corten sus hojas.
Los peregrinos son especialmente numerosos sobre todo durante el festival del Maha Shivaratri (la gran noche de Siva) que se celebra en la noche del día trece del mes Phalguna (entre febrero y marzo) del calendario hindú. Esa noche bajo el Thimmamma Marrimanu tiene lugar una gran jatara (vigilia nocturna acompañada de música y danzas) a la que acuden miles de personas. Los lugareños afirman que bajo la copa del árbol se pueden reunir hasta 20.000 personas.
El Thimmamma Marrimanu todavía sigue creciendo y expandiéndose, favorecido por hallarse situado en un entorno de campos agrícolas con poca competencia arbórea en su alrededor. Razón por la cual ha llegado a tener tan impresionante extensión, con unas 4.000 raíces-tronco que se retuercen arriba y abajo en todas direcciones.
Fuentes
Anantapur / Mother Nature Network / GoRoadTrip / Smithsonian / Wikipedia.
Descubre más desde La Brújula Verde
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.