Los antiguos griegos marcaban el centro del mundo colocando un ónfalo (ombligo) en la forma de una piedra sagrada.
El más famoso estaba situado en el oráculo de Delfos, indicando que a partir de ese punto se había creado todo el mundo restante. Por supuesto otros pueblos también tuvieron su centro del mundo. Los hubo en Mileto, Sicilia, Polonia, Italia por citar solo unos pocos. En la antigua Grecia se sabe que hubo por lo menos nueve o diez.
Y en Estados Unidos hoy en día está el singular Centro del Universo en la localidad de Tulsa, que aunque no tiene el encanto ni el misterio de los antiguos y es más bien un sitio anodino, sí que posee una peculiar característica, una anomalía acústica que sorprende a todo el que lo visita.

Se encuentra situado a la altura del número 20 de la calle Archer en su confluencia con la Avenida Boston, y su apariencia no es nada del otro mundo, un simple círculo de baldosa de unos 75 centímetros de diámetro rodeado por otras 13 filas de baldosas de tamaño rectangular y color rojo. Fue creado en los años 80, cuando se reconstruyó la zona tras un incendio.
Cuando una persona se sitúa en el centro del círculo, mirando en cualquier dirección, y habla o hace un ruido oirá su propio eco reproducido varias veces más alto que su voz, mientras que los que estén situados fuera de él no lo oirán. En su lugar percibiran la voz o el ruido pero muy distorsionado.
Lo mismo sucede si alguien fuera del círculo le habla a otra persona que se encuentre frente a él y también fuera, haciendo que el sonido pase por encima del centro.
Este curioso efecto parece ser producido por los muros circulares que rodean al lugar, aunque nunca se ha comprobado, por lo que hay múltiples teorías al respecto. Una de ellas lo achaca a una junta metálica de dilataciónque atraviesa el círculo, ya que se encuentra situado sobre un viaducto o paso elevado, lo que produciría accidentalmente esta curiosa anomalía acústica.
Lamentablemente en los videos disponibles en YouTube no se aprecia demasiado bien el efecto, quizá debido a la baja calidad de los micrófonos de los smartphones.
Fuentes
Gutierre Tibon: El ombligo como centro cósmico / Uncovering Oklahoma / Tulsaworld
Descubre más desde La Brújula Verde
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.