El egiptólogo Wael Sherbiny presentó en 2016 en la Conferencia Internacional de Demonología Egipcia Antigua en la Universidad de Swansea, Reino Unido, su descubrimiento de las representaciones de demonios más antiguas de Egipto. Su datación se establece hace unos 4.000 años.
Las representaciones, que muestran a los demonios sustituyendo las cabezas de sus víctimas por las suyas propias, se hallaron en dos sarcófagos pertenecientes al Imperio Medio (2050-1750 a.C.) y en un rollo de cuero manuscrito. Éste se hallaba en los archivos del Museo Egipcio de El Cairo, sin que nadie lo hubiera examinado en los últimos 70 años, a pesar de que se trata del manuscrito en cuero más antiguo y largo de los descubiertos hasta el momento.
Los demonios ya eran conocidos por los investigadores, lo que no se sabía era como eran representados en la Antigüedad. Las imágenes identificadas ahora son en unos casos zoomorfas y en otros antropomorfas. El demonio llamado In-tep aparece como un babuino con cabeza de perro, mientras que Chery-benut muestra una cabeza humana sobre una figura inidentificable. Ambos están representados como los guardianes de la entrada de un templo que contiene varias cámaras custodiadas por otras entidades demoníacas. El edificio se relaciona con el dios Toth y el dios del Sol.
Aparte de los nombres ningún texto aparece explicando la función de estos demonios. In-tep podría denotar la función de cortar cabezas a los intrusos, según Sherbiny.
El tercer demonio es Ikenty, el guardian de la Casa de Osiris. Este demonio ya era conocido, pues se halló retratado en un sargófago de 1870-1830 a.C., con la forma de pájaro con cabeza de felino negra. Precisamente es el que Sherbiny encontró en el rollo de cuero, que sería muy anterior al del sarcófago. En este caso si existe texto explicativo, acerca de la rapidez de ataque y el control ejercido por el demonio sobre aquellos a quienes puede ver.
El descubrimiento es importante porque revela que los elaborados dibujos polícromos de entidades del Imperio Nuevo (1550-1070 a.C.) tienen raíces mucho más antiguas de lo que se pensaba.
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