Todo el mundo sabe que los griegos daban una gran importancia al deporte y al ejercicio físico, como parte básica e indispensable de la educación de los ciudadanos. Sobre todo a los deportes individuales practicados por los efebos en el gimnasio.
Sin embargo también existieron deportes de equipo como el Episkyros (también llamado Phaininda), cuyo origen se remonta al año 2000 a.C.
El Episkyros era un juego de pelota con similitudes con el fútbol europeo, el rugby y el fútbol americano. Una de las características principales de este juego es que no era practicado sólo por hombres, como el atletismo y el resto de deportes griegos, sino que también participaban mujeres.
Como no existen documentos que expliquen sus reglas la mayoría de lo que se sabe acerca del Episkyros procede de relieves y cerámicas, donde se representa a los jugadores e incluso el terreno de juego.
Así se sabe que el terreno de juego tenía más o menos el tamaño de una cancha de hockey. Dos equipos de entre 12 y 14 jugadores se colocaban uno a cada lado del campo, separados por una línea central marcada con piedras llamada skuros. Tras cada equipo había otra línea. El objeto del juego era conseguir empujar a todo el equipo contrario por detrás de su línea de campo.
Esto parece que era mucho más importante que la anotación de tantos arrojando la pelota por encima de las cabezas de los contrarios, la posesión de la misma en el área propia, o los equilibrios del follis (nombre dado a la especie de balón con que se jugaba, elaborado con vejigas de cerdo infladas).
No está muy claro si solo se podían utilizar los pies o también las manos. Pero está claro que la fuerza y la habilidad jugaban un papel importante. En Esparta las normas eran un poco diferentes. Participaban hasta 30 jugadores por equipo, y era ciertamente un juego mucho más violento.
Quizá la representación más conocida de este antiguo deporte es la que se encuentra en un lecito ático en el Museo de la Acrópolis de Atenas. Muestra a un jugador haciendo equilibrios con la pelota. Según algunos autores esta imagen se reproduce en el trofeo de la Eurocopa de Fútbol, quizá como reconocimiento a uno de los posibles orígenes del fútbol actual. No obstante no hemos hallado ninguna evidencia gráfica que lo demuestre.
Descubre más desde La Brújula Verde
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.