Pacífico. España y la aventura de la Mar del Sur

Terminó 2013 y, con él, el quinto centenario del descubrimiento del océano Pacífico por el jerezano Vasco Núñez de Balboa. Si no saben nada de su aventura en busca de aquel mar, que le llevó a cruzar exitosamente el istmo de Panamá a través de densas selvas infestadas de mosquitos y tribus hostiles bajo las implacables condiciones ambientales del trópico (calor y humedad), aún están a tiempo de hacerlo gracias a la exposición que ofrece el Archivo General de Indias en Sevilla.

El evento, titulado Pacífico. España y la aventura de la Mar del Sur, parece haber despertado el suficiente interés -unas 80.000 visitas desde su apertura en septiembre- como para que se haya prorrogado hasta bien entrada la próxima primavera: el 20 de abril. Es algo meritorio, creo yo, teniendo en cuenta que no se trata de un museo; y es que el Archivo de Indias suele organizar exposiciones muy interesantes sobre temas navales que tratan la relación de España con su antiguo imperio colonial, tal como indica su nombre.

El actual, fruto de la colaboración del Ministerio de Educación, Cultura y deporte con la Acción cultural Española, está comisariado por Antonio Fernández Torres y Antonio Sánchez de Mora, que aprovechan parte de los espléndidos fondos documentales de la institución: libros de registro, mapas y cartas se suman a piezas de otro tipo que enriquecen la visión general, como maquetas navales, piezas de orfebrería, armas, porcelanas, obras de arte indígena, etc.

Pacífico. España y la aventura de la Mar del Sur viajará después al National Museum of Philippines, de Manila (Filipinas), para seguir a lo largo de este año y el siguiente una gira por otros países del Pacífico mostrando el protagonismo español en la exploración de dicho océano, decisivo para iniciar el apasionante proceso histórico de convertir el mayor vacío cartográfico del planeta en un concepto geográfico definible en menos de un siglo.

Todo gracias a una de esas iniciativas personales, tan típicas de la época, de un conquistador andaluz que, tras unos años de segundón en el Caribe, se lanzó a una osada expedición siguiendo únicamente las habladurías de los nativos. Así capitaneó a 190 soldados españoles -Pizarro entre ellos, antes de que intentara su propio sueño en Perú- y un millar de indios en una marcha a pie por la selva de Darién (Panamá, que casualmente celebra este 2014 el centenario de la construcción del Canal), hasta que el 23 de septiembre de 2013 vislumbró desde una colina lo que bautizó como Mar del Sur.

Historia, aventura, emoción, individualismo, violencia, heroísmo, miseria, grandeza… Todas estas palabras sirven para definir las acciones de aquellos personajes casi legendarios que transformaron el mundo sin más ayuda que una autorización real, jugándose su propio dinero, su esfuerzo y su vida, y que en general tuvieron un final amargo en su propio país, como es el caso del propio Núñez de Balboa, ejecutado por usurpación de poder. Hoy apenas se salvan del olvido, o de ser denigrados simplonamente, gracias a eventos especiales como éste.

Más información: Archivo General de Indias