Trasladar la esfericidad de nuestro planeta a un papel plano como mapa es una tarea difícil, que no está exenta de errores, o por lo menos inexactitudes. Éstas puden llevarnos a tener una idea equivocada del mundo en el que vivimos, a menos que estemos previamente advertidos. Es lo que ocurre con el mapamundi más famoso, el que todos hemos estudiado de pequeños. Estoy hablando, efectivamente, de la proyección Mercator.

Ya hablamos aquí de Mercator en un post acerca del 500 aniversario de su nacimiento, en el que explicábamos que

inventó un nuevo tipo de proyección cartográfica en la que la esfera terrestre se traspasaba cilíndricamente al plano y las líneas de longitud pasaban a ser rectas y paralelas. Algo tan simple como eso facilitaría enormemente el trabajo de los marinos, permitiéndoles trazar rumbos a partir de las líneas que marcaban las brújulas

Su primer mapamundi en aplicar la nueva proyección se publicó en 1569, suponiendo la aparición de los meridianos y paralelos tal y como hoy los conocemos y seguimos utilizando. El problema que tiene la Proyección Mercator es que distorsiona el tamaño de las tierras, aumentándolo según se alejan del Ecuador y se acercan a los polos.

Proyección de Mercator / foto dominio público en Wikimedia Commons

Por eso, ante un mapa realizado con esa proyección puede parecernos que Groenlandia es tan grande como África, cuando en realidad África es 14 veces más grande que Groenlandia.

O que Alaska es casi tan grande como todo el resto de los Estados Unidos. En realidad el resto de Estados Unidos es 3 veces más grande que Alaska.

Y también que Sudamérica es más o menos del tamaño de Europa (sin Rusia). Cuando realmente Sudámerica es el doble de grande que Europa.

El caso de la Antártida ya es de locura, pues parece que fuera mayor que Asia y Europa juntas, lo cual no es en absoluto cierto. La Antártida tiene unos 14 millones de kilómetros cuadrados de superficie, mientras que solo Asia ya tiene 44 millones y medio, es decir, unas cuatro veces más.

Muy probablemente el viejo atlas que tienes en casa usa la Proyección Mercator. Pero también lo usan, entre otros, Google Maps y Virtual Earth 2D. Y es que, debido a las críticas, los atlas modernos ya no suelen usar esta proyección para las zonas alejadas del Ecuador.

Proyección Gall-Peters / foto Strebe en Wikimedia Commons

En 1974 Arno Peters presentó una alternativa, la Proyección Gall-Peters (que llamó así porque había copiado de un mapa del siglo XIX realizado por James Gall). Pero en esta ocasión el problema estaba en que distorsionaba horizontalmente las tierras cercanas a los polos, mientras que lo hacía verticalmente con las tierras cercanas al Ecuador.

En 1989 siete grupos geográficos norteamericanos desecharon finalmente el uso de los mapamundis realizados con coordenadas rectangulares cilíndricas, lo que incluye la proyección de Mercator y la de Gall-Peters.

Proyección Winkel-Tripel / foto Strebe en Wikimedia Commons

En 1998 la National Geographic Society adoptó para sus mapas la proyección inventada por Oswald Winkel en 1921. Esta proyección intenta minimizar todas las distorsiones provocadas por las proyecciones cilíndricas, y por eso es la que más se emplea en la actualidad.

podría decirse que la Winkel-Tripel es la mejor proyección conocida para representar el mundo entero, produciendo muy pequeños errores de distancia, pequeños errores de combinaciones de elipticidad y área, y menor asimetría estadística que cualquier otro mapa

Proyección Winkel-Tripel, indicatriz Tissot / foto Eric Gaba en Wikimedia Commons

No obstante, tampoco es perfecta, como se puede ver en la indicatriz de Tissot, que se usa para medir las distorsiones de las proyecciones cartográficas.

Una alternativa curiosa pero raramente utilizada es el Mapa Dymaxion inventado por Buckminster Fuller en 1946. Se trata de una proyección que representa la Tierra en la superficie de un poliedro que puede desplegarse de diferentes formas. Por ejemplo, en la imagen siguiente está desplegado representando el mundo como un océano rodeado de tierra firme.

Mapa Dymaxion / foto Eric Gaba en Wikimedia Commons

Lo cierto es que el Dymaxion tiene menos distorsiones que las proyecciones de Mercator y Gall-Peters, pero es poco útil ya que no tiene orientación, no existe Norte ni Sur.

En definitiva, no existe ninguna proyección que sea capaz de representar el mundo con exactitud. Algo que deberíamos tener en cuenta cuando consultamos un mapa.


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