El GIF cumple 25 años

Como la Historia no tiene por qué limitarse a batallas épicas, grandes descubrimientos, personalidades políticas o crisis económicas, ahí va un pequeño pero extendido capítulo que cada día alegra la vida un poco más a quienes tienen que trabajar con el ordenador: el pasado 15 de junio se cumplió un cuarto de siglo de la creación de los GIF.

Los GIF, para el que no lo haya pillado, son esos miniarchivos que contienen imágenes animadas, generalmente divertidas, que no terminan nunca porque cuando siempre vuelven a empezar en un bucle infinito. Las siglas significan Graphics Interchange Format y designan a un formato creado en 1987 por la empresa CompuServe. Pese a que limita la paleta de colores a 256, su uso práctico se aplica básicamente en publicidad, en banners con animación de imágenes, aunque los GIFs circulan masivamente por los ordenadores particulares como diversión.

Aún recuerdo el primero que me enviaron, hace varios años: un baile protagonizado por Spiderman. Desde entonces se han ido generalizando y los hay de todo tipo, desde los que son simples dibujos a los que tienen base fotográfica, de personajes de ficción a los reales, con situaciones cómicas o simplemente decorativas… Los omnipresentes emoticonos se pueden considerar hijos de los GIF.

Hay páginas web donde se pueden elegir y descargar pero uno también se puede hacer su propio GIF con algún programa ad hoc gracias a que la patente sobre el algoritmo de comprensión, llamado LZW, expiró en 2003 y hoy es libre. El vídeo de arriba es una breve historia del GIF hecha precisamente a base de, sí, GIFs.