El arte adopta muchas formas. En ocasiones puede ser simplemente un elemento que, en su medio natural no sería considerado arte, pero que al extraerlo y colocarlo en un medio diferente sí puede asumir esa característica, convertirse en una obra de arte. Eso es lo que el artista italiano Massimo Bartolini ha conseguido con la creación de Bookyard, una biblioteca al aire libre que además, por lo comentado antes, es una obra de arte.
La instalación forma parte del festival de arte TRACK: a contemporary city conversation, en ciudad belga de Gante, y se extiende a lo largo de un extenso viñedo siguiendo incluso las lineas orográficas del terreno.
Pero la obra va mucho más allá del simple impacto visual. Los estantes de la biblioteca están repletos de auténticos libros donados por las bibliotecas de la zona, y por una pequeña cantidad puedes llevarte a casa uno o varios, o lo que es lo mismo en este caso, puedes llevarte a casa un trozo de una obra de arte.
Los beneficios recaudados servirán para sostener económicamente a las bibliotecas participantes, y a cambio obtienes un pedazo de arte único e irrepetible.
Sitio Oficial | TRACK: a contemporary city conversation
Vía | Design Boom
