La inventiva de los ingenieros para solucionar problemas y ahorrar costes no tiene límites. La verdad que muchas veces este tipo de proyectos pueden parecer autenticas locuras pero otras nos permiten disfrutar de increíbles piezas arquitectónicas.
En este caso os quiero presentar el Magdeburg Water Bridge, el acueducto navegable más largo del mundo, se encuentra en Alemania y une el canal Elba-Havel al Canal Central, y permite a los barcos cruzar sobre el río Elba.

Esta idea de conectar los dos canales que se encuentran en lados opuestos del río Elba se remonta a los años 30 pero debido a la 2ª Guerra Mundial y la posterior división de Alemania, la obra quedó suspendida hasta el año 1997.
Gracias a la construcción del acueducto los barcos han evitado tener que dar un rodeo de 12 kilómetros. El cual consistía en descender desde el Canal Central por el puente marítimo de Rothensee al río Elba. Navegar aguas abajo en el río hasta el bloqueo de Niegripp y subir hasta el Canal de Elba-Havel. El problema era que el río Elba presentaba a menudo bajos niveles de agua, por lo que impedía que barcos con cargas muy grandes realizaran este trayecto.

El Magdeburg Water Bridge tardó seis años en construirse y costó 500 millones de euros. La estructura está construida con cerca de 68.000 metros cúbicos de hormigón, 24.000 toneladas métricas de acero y mide 918 m (690 m sobre la tierra y 228 m sobre el agua).