En junio de este año abrirá sus puertas el nuevo Museo Nacional de Arqueología Subacuática (ARQVA), con sede en Cartagena.

La misión del museo será la de documentar e inventariar, proteger y divulgar nuestro patrimonio submarino. Algo que lleva mucho tiempo haciendo falta en este país. Y no sólo por los numerosos expolios sufridos, sino porque la inmensa mayoría de los ciudadanos desconoce absolutamente la riqueza que atesoran nuestras aguas.

Llama la atención el edificio del museo, obra del arquitecto Guillermo Vázquez Consuegra (Premio Nacional de Arquitectura 2005), de caracter muy funcional y perfectamente integrado con el paisaje del puerto de Cartagena.

«El nuevo Museo dispone de unos 6.000 m2 de superficie de los que alrededor del 35% se destina a exhibición de colecciones, al disponer de una sala de Exposición Permanente de 1.600 m2, y de una extraordinaria sala de 500 m2 destinada a albergar el futuro y dinámico programa de Exposiciones Temporales del Centro. A estos grandes espacios hay que añadir los casi 1.000 m2 destinados a la conservación de los ricos y variados fondos que atesora el Centro, dotado de un gran anforario, de una excepcional sala de compactos y de un almacén visitable en donde se exhibirán las colecciones que no tienen espacio en la Exposición Permanente, ordenadas por pecios o yacimientos.»

Ya se por donde me voy a dejar caer en verano, si nada lo impide, claro.


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