Bicicletas electricas madera2

Desde que se inventaron los materiales artificiales, plásticos, fibra de vidrio y demás, la madera ha pasado a un segundo plano, destinada casi exclusivamente al hogar. Hubo un tiempo en que radios, televisores, barcos e incluso coches estaban hechos total o parcialmente de madera. Lo que nunca recuerdo haber visto antes bicicletas fabricadas con ese material, aunque en este blog sí que publicamos algún que otro post al respecto. Pues aquí va otro.

Están fabricadas por Bough Bikes, una empresa holandesa que acaba de presentarlas al NYxDesign 2014 que se ha celebrado este mes de mayo. Bough utiliza la madera -roble francés de bosques sostenibles, para ser exactos- para casi todas las partes de sus bicis, desde el cuadro al manillar, pasando por el guardabarros. Sólo se introducen otros materiales en los pedales, la cadena y las ruedas.

La pregunta que cabe hacerse es por qué usar madera para hacer algo que hasta ahora empleaba casi exclusivamente metal o, más recientemente, fibra de carbono. Quienes mejor podrían responder a eso serían sus diseñadores, Jan Gunneweg y Piet Brandjes, quienes explican que la madera es cálida y absorbe la vibración sin dejar de resultar sólida y cómoda. Por otra parte, estas bicis son muy fáciles de controlar y requieren poco esfuerzo por su liviandad.

Añaden que la madera da sensación de paz y relajación. Hay que reconocer que también contará el diseño, chic y divertido. Y es que estas bicis no son precisamente deportivas sino para disfrutar de paseos cotidianos urbanos sintiéndose cerca de la naturaleza. Al fin y al cabo, la madera soporta bien la lluvia.

Aclaremos que se trata de bicicletas eléctricas, que únicamente requieren unas pocas pedaladas antes de que su pequeño motor se ponga en marcha y al impulse por sí mismo; permite alcanzar una velocidad aproximada de veinticuatro kilómetros por hora y tiene autonomía para circular cuarenta y ocho kilómetros aproximadamente. Luego hay que recargar la batería entre tres y seis horas.

Eso no es todo. Al llegar a dieciocho kilómetros por hora cambia de desarrollo automáticamente, actuando sobre el engranaje de las ruedas dentadas. Y Bough ofrece la posibilidad de personalizarlas, eligiendo el tamaño y color de los neumáticos, el color del sillín, incorporar una caja detrás o delante (como en la foto superior), imprimirle un logotipo o nombre en el bastidor, etc. Todo ello por mil quinientos euros, IVA incluido.

Más información: Bough Bikes

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