Unos palés de madera reciclados se engarzan formando un gran contenedor, se llena de heno y se coloca en algún lugar público, como parques, áreas recreativas, plazas y similares. Entonces la gente se lanza de cabeza sobre esa capa vegetal para divertirse. Algo tan simple y enrevesado a la vez, de concepción casi surrealista, fue la propuesta de un grupo de diseñadores, arquitectos y artistas italiano que se llaman Rural Boxx. El invento fue bautizado, claro, como Jump! y parece haber tenido cierto éxito.